
Sun & Sea, la aclamada ópera-performance Lituana, celebra el segundo aniversario del Centro Nacional de las Artes Delia Zapata Olivella y abre el festival No Convencional.
Hasta el 24 de marzo el Teatro Colón, de Bogotá, está sin sillas y sin escenario. O, mejor dicho, el escenario se trasladó a toda su platea, que ahora es una playa artificial con toneladas de arena.

La razón es Sun & Sea, la innovadora ópera-performance lituana que combina humor, ironía y reflexiones sobre el cambio climático, el turismo masivo y la alienación moderna.
La obra, ganadora del León de Oro en la Bienal de Arte de Venecia 2019, ha recorrido Asia, Europa, EE. UU. y Suramérica, donde ha sido aclamada.
Más de treinta participantes, vestidos con trajes de baño y rodeados de toallas y sombrillas (y dos perros) tomarán el sol bajo una iluminación artificial y, en el caso del teatro Colón, rodeados por varios calentadores de ambiente que suben la temperatura de la siempre fría Bogotá.
El público, ubicado en los balcones, también sin sillas puede moverse libremente durante la función, para disfrutar de distintas perspectivas, aunque, como se sabe, los palcos son tan justos que tal vez no sea necesario tal movimiento.
Sun & Sea es una creación de las artistas lituanas Rugilė Barzdžiukaitė, Vaiva Grainytė y Lina Lapelytė. En esta ocasión, apoyada con la participación del Coro Nacional de Colombia.

La puesta en escena incluye canciones originales en lituano, traducidas al inglés y, para esta presentación, con traducción al español en una pantalla frontal. La música electroacústica se integra con los cantantes que interpretan acostados en la arena o en las tumbonas, mientras toman el sol en esa playa a la que han viajado para descansar de su vida cotidiana.
Según la organización, durante las funciones “se invitará a artistas, líderes de opinión y creadores de contenido a formar parte del performance, interactuando con los participantes y el espacio”.
Una reto desde la platea
Sun & Sea plantea un reto desde el punto de vista de los actores y de la manera en que los espectadores pueden asistir a la puesta en escena. El hecho de que sea una pieza contemporánea en un lugar como el Teatro Colón le da cierto toque que desacraliza el lugar. Puede ser divertida, sí, y las interpretaciones en medio del suave rumor generado por la charla de los que están en la playa invitan a presenciar de una manera más relajada.
De hecho, que se permitan tomar fotos y videos de no más de tres minutos casi es un llamado a hacerlos. Ahora bien, esta cierta informalidad resulta un reto para seguir el curso de la obra. Al no existir un foco en el que se deba centrar la mirada, pues los actores operan libremente, puede suceder que el que mira se distraiga de la pantalla donde está la traducción de la letra, lo que puede interferir en la comprensión total de la pieza.

Un problema derivado, claro, de que la letra sea en inglés, asunto que no han tenido que sortear los angloparlantes.
Esto aunque las letras son sencillas y alguien con un inglés mediano podría entenderlas, en su contexto.
Por lo demás, Sun & Sea es de esas obras que, en lo posible, no se deberían dejar pasar si gusta del teatro musical, la performance o los espectáculos que rompen con lo acostumbrado y que son retadores.
No está de más añadir que la propuesta ha sido definida por medios internacionales como "obra maestra" (The New York Times); "Lamento por el eclipse del mundo" (The Guardian) e "Impresionante" (Financial Times). Así pues, si tiene tiempo en este tiempo, vaya y saque sus propias conclusiones. No creo que para nada se arrepienta.
Diego Guerrero
Editor
Fechas y funciones:
Teatro Colón, Centro Nacional de las Artes
Del 21 al 24 de marzo de 2025
Horarios: consulta en www.tuboleta.com
Entradas desde $149.000 con descuentos para estudiantes, adultos mayores.